La reforma del sector del juego en Finlandia marca un cambio significativo en la regulación del mercado, que hasta ahora había estado dominado por Veikkaus, el operador público. La propuesta, presentada por el gobierno de Petteri Orpo y prevista para entrar en vigor en enero de 2027, busca liberalizar parcialmente la industria, permitiendo la entrada de operadores privados en los segmentos de casinos online y apuestas deportivas mediante la concesión de licencias y la publicidad en el país.
Este paso representa una transformación histórica para Finlandia, que durante décadas ha mantenido un modelo centralizado y monopolístico, con el objetivo de proteger a los jugadores y prevenir la adicción al juego. Sin embargo, una de las decisiones más sorprendentes de esta reforma es que las máquinas de juego no serán eliminadas de bares, supermercados y quioscos; en cambio, seguirán siendo controladas por Veikkaus y permanecerán en estos lugares, lo que indica un enfoque de regulación que busca equilibrar la liberalización con la supervisión de sectores considerados sensibles.